jueves, 2 de febrero de 2017

Oppidum de Ulaca (Solosancho. Ávila)

Tras nuestras visita al castro de Las Cogotas nos dirigimos a visitar el que quizá sea el castro más conocido del mundo vetón: Ulaca.

Este oppidum de 60 ha se localiza a 23 km de la ciudad de Ávila. Se sitúa en las estribaciones septentrionales del macizo de Gredos, en el arranque de la Sierra de la Paramera, y con una situación estratégica sobre el Valle de Amblés

En la localidad de Villaviciosa de la Sierra, población de refrencia para la visita, se conserva un verraco procedente de las inmediaciones del castro, situado frente al pequeño castillo del siglo XV que lleva el nombre de la localidad.

Desde sus murallas se tienen unas vistas espectaculares de la Sierra de la Paramera, en cuyas estribaciones este emplazamiento vivió su máximo apogeo a finales de la Edad del Hierro (siglos III-I a. C). Su abandono se produjo, como en el caso de muchos otros emplazamientos de las poblaciones prerromanas, durante el proceso de conquista de Hispania por Roma. Lo más probable es que su población fuera obligada a abandonar el oppidum para trasladarse a las zonas llanas, práctica habitual de los romanos con las poblaciónes indígenas para su mejor control, y poder evitar rebeliones.

En las inmediaciones de Ulaca se han localizado tres verracos. Estas esculturas zoomorfas (seguramente con finalidad protectora o de demarcación del territorio) son las expresiones más características del pueblo vetón, por lo que también es conocido como cultura de los verracos.

Verraco. Villaviciosa de la Sierra
Verraco. Villaviciosa de la Sierra

Ulaca tiene interés no sólo por los restos arqueológicos, sino también por su privilegiada situación. Situado a una altitud de 1500 metros ocupa un lugar visible y de dominación del territorio circundante, además de ofrecer una buena defensa.

Sierra de la Paramera
Sierra de la Paramera

Para acceder al castro hay que dirigirse a las afueras del pueblo, por una pista en buen estado. Tras unos 500 metros se localiza el cartel informativo que indica el inicio del sendero de acceso a los restos. Tendremos que enfrentarnos a un kilómetro de camino empinado por un sendero bien señalizado. Durante el ligero ascenso podemos disfrutar de la excelentes vistas de la Sierra de la Paramera y el Valle de Amblés, lo que nos dará una idea de la situación estratégica del oppidum de Ulaca.

En este magnífico yacimiento podremos acercarnos a varias estructuras que nos permitirán hacernos una idea de la vida en el oppidum:
  • Sistema defensivo: muralla, torres y accesos.
  • Altar de los sacrificios o santuario.
  • Sauna.
  • Viviendas.
  • Canteras.

 

Acceso y muralla noroeste

Los primeros restos que localizamos son las potentes fortificaciones artificiales. Las murallas de granito rodean el cerro con un perímetro de 3.000 metros y un espesor que llega hasta los 2 metros. Se adapta a la morfología del terreno aprovechando las afloraciones graníticas como defensas naturales e interrumpiendo el trazado en los puntos en los que no es necesaria una defensa adicional.

La muralla dispuso de varios accesos, los mejor conservados son las puertas noreste y noroeste. Por esta última accedemos al oppidum. En este sector encontramos una triple defensa. Un primer lienzo más deteriorado al que se llega por un camino aparentemente enlosado.

Primer lienzo. Camino de acceso
Primer lienzo. Camino de acceso

En este punto localizamos un panel informativo, los encontraremos a lo largo del recorrido lo que facilita la visita, en el que se hace referencia un posible lugar de culto en las inmediaciones de un gran bloque de granito conocido como Gran peña caballera.

Gran peña caballera. Zona norte. Ulaca
Gran peña caballera. Zona norte. Ulaca

En pocos metros llegamos a una segunda estructura defensiva, en este caso restaurada. La tercera línea defensiva, la muralla propiamente dicha, tiene forma de embudo, de manera que entre la segunda y tercera línea defensiva se delimitaba un gran espacio pensado para "encerrar" a los posibles enemigos y poder acosarlos.

Sengunda línea defensiva. Acceso noroeste. Ulaca
Sengunda línea defensiva. Acceso noroeste. Ulaca

El acceso noroeste se encuentra escoltado por potentes torres que flanquean el paso hacia el interior del oppidum.

Acceso noroeste. Ulaca
Acceso noroeste. Ulaca

 

Zona de hábitat. Viviendas

Por fin nos encontramos dentro de la zona de hábitat. Ahora podemos hacernos una primera idea de las dimensiones del emplazamiento. En el oppidum se diferencian dos zonas, una en la parte más elevada, a modo de acrópolis, donde se localizan las viviendas de mayor calidad; y una segunda en la zona más baja.

Se han localizado dentro del recinto unas 250 viviendas cuyas dimensiones oscilan entre los 50 y los 250 m2, todas ellas de planta ractangular. Los cálculos estiman una población aproximada de 1.500 habitantes.

A lo largo de la visita se pueden localizar gran cantidad de estas estructuras delimitadas por los bien conservado zócalos de piedra. Solamente dos de estas viviendas han sido excavadas y restauradas (situadas junto a una de las canteras).

Vivienda restaurada
Vivienda restaurada

Viviendas adosadas
Viviendas adosadas

Restos de vivienda
Restos de vivienda

 

Altar de los sacrificios

Siguiendo el recorrido marcado uno de los primeros lugares que vemos es también uno de los más espectaculares y conocidos: el conocido como altar de los sacrificios o santuario, uno de los res edificios públicos localizados en el yacimiento.

Altar de los sacrificios. Ulaca
Altar de los sacrificios. Ulaca

Altar de los sacrificios. Ulaca
Altar de los sacrificios. Ulaca

Es un pequeño recinto parcialmente excavado en la roca que se compone de dos parte. La primera es un recinto excavado en la roca. La segunda es una peña de granito en la que se puede ver, en su lado norte, una doble escalera tallada que dan acceso a una pequeña plataforma superior con varias cavidades excavadas y comunicadas entre sí. Se ha interpretado como un lugar de realización de sacrificios, tanto de animales como humanos (documentados en las fuentes clásicas, como un testimonio del historiador romano Plutarco).

Recinto excavado. Altar de los sacrificio
Recinto excavado. Altar de los sacrificio

Doble escalera y cavidades. Altar de los sacrificios
Doble escalera y cavidades. Altar de los sacrificios

 

Sauna

Nuestra visita nos lleva al segundo edificio público del recinto: la sauna (también conocido como "la fragua"). Se trata de una construcción semihipogea excavada en roca de planta rectangular. Se ha interpretado como una sauna ritual, asociada a ritos de iniciación de cofradías de jóvenes guerreros (estos ritos fueron documentados por Estrabón entre los lusitanos).

En la estructura se pueden apreciar tres partes bien diferenciadas: un horno para el fuego, con una abertura en forma de arco de medio punto; una cámara con dos asientos para recibir los baños de vapor; y una antecámara.

Horno. Sauna ritual. Ulaca
Horno. Sauna ritual. Ulaca

Antecámara. Sauna ritual. Ulaca
Antecámara. Sauna ritual. Ulaca

Sauna ritual. Ulaca
Sauna ritual. Ulaca

La interpretación realizada de esta construcción se basa en algunos paralelismos con estructuras similares de la cultura castreña del Noroeste peninsular (las conocidas como pedras fermosas), pero es una interpretación discutida.

Canteras

Si seguimos el itinerario marcado llegaremos a las viviendas reconstruidas. En sus inmediaciones se localiza una de las numerosas canteras existentes dentro del oppidum. Se interpreta que los bloques extraídos de esta cantera eran utilizados para la construcción de las viviendas cercanas.

En esta cantera podemos distinguir de manera sorprendentemente clara las diferentes fases de extracción de los bloques de granito. Hay bloques esbozados mediante "cuñeras" a intervalos regulares y en línea recta.

Bloque esbozado con "cuñeras". Cantera. Ulaca
Bloque esbozado con "cuñeras". Cantera. Ulaca

También se pueden observar grandes bloques separados de la roca pero sin trocear. Y, por último, se distinguen, bloques terminados, pero no transportados. Dado que se puede hacer un seguimiento de toda al cadena de extracción y trabajos posteriores, se puede afirmar que todo el trabajo se realizaba in situ.

Bloques sin trocear. Cantera. Ulaca
Bloques sin trocear. Cantera. Ulaca

Bloques sin transportar. Cantera. Ulaca
Bloques sin transportar. Cantera. Ulaca

 

Muralla sur

A partir de este punto el sendero se vuelve confuso. Nos dirigimos hacia la parte alta del cerro para contemplar la panorámica y disfrutar del entorno. Durante el ascenso numerosos amontonamientos de bloques nos indican la localización de las numerosas viviendas que inundan las zonas más protegidas.

En el punto más elevado, a 1500 metros de altitud, las vistas son magníficas. La Sierra de la Paramera dibuja el horizonte hacia el sur. Y el viento azota con fuerza el granito.

Zona alta del Cerro de Ulaca
Zona alta del Cerro de Ulaca

Recorremos con detenimiento cada rincón. Buscamos la muralla sur, pero el sendero no está muy marcado. Parece que este punto, el más alejado respecto del acceso noroeste, no es tan visitado. Por fin, desde el punto más elevado, vemos el trazado de la muralla.

La vertiente sur incialmente carecía de muralla ya que debido a sus condiciones, fuerte pendiente hacia el río Picuezo, la hacía innecesaria. Pero en algún momento, seguramente por una aumento de la inestabilidad en la zona, se hizo necesario potenciar las defensas del oppidum. La muralla sur no llegó a finalizarse. Estaba puesta una primera hilada e incluso hay bloques preparados para ser colocados, pero se interrumpió su construcción de manera abrupta.

Muralla sur, Ulaca
Muralla sur, Ulaca

Muralla sur, Ulaca
Muralla sur, Ulaca


A pocos metros se localizan una cantera donde se puede observar el trabajo de extracción en diferentes fases y cuyos bloques de granito, con toda probabilidad, eran utilizados para la construcción de la muralla sur, dada su proximidad.

Cantera junto a la muralla sur. Ulaca
Cantera junto a la muralla sur. Ulaca

 

 

Torreón

Descendemos ahora hacia la vaguada que se abre hacia el noreste. Desde la altura a la que nos encontramos se percibe un gran derrumbe que nos indica la situación del tercer. y último, edificio público: el torreón.

Derrumbe del torreón. Ulaca
Derrumbe del torreón. Ulaca

Se trata de un edificio de grandes dimensiones en planta e importante altura, si nos atenemos al derrumbe existente, construido en la parte alta del castro, en el límite entre la acrópolis y la zona más baja. Su construcción se realizó con grandes sillares cuadrados y rectangulares.

Sillares del torreón. Ulaca
Sillares del torreón. Ulaca

Aunque su función no esta clara, sus grandes dimensiones hacen pensar en una función relacionada con las élites del opiddum, ya sea esta pública o privada.

Acceso y muralla noreste

Terminamos nuestro intenso recorrido abandonando el yacimiento por el acceso noreste. Esta acceso, bien conservado, presenta una puerta de esviaje, es decir, dos tramos de muralla que adoptan posición paralela.


Acceso noreste. Ulaca
Acceso noreste. Ulaca

Este acceso daba paso a un camino enlosado, recorrido en parte por el sendero de regreso al punto de inicio, y que daba acceso a las tierras del valle para su cultivo.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
INFORMACIÓN ADICIONAL:
BIBLIOGRAFÍA:
  • FABIÁN GARCÍA, J.FRANCISCO. Ruta de los castros vettones de Ávila y su entorno. 
  • RODRÍGUEZ-HERNÁNDEZ, JESÚS. 2012. Los procesos técnicos de la cantería durante la Segunda Edad del Hierro en el occidente de la Meseta. Zephyrus: Revista de prehistoria y arqueología. 70, PP. 113-130
  • ALMAGRO-GORNEA, MARTÍN; ÁLVAREZ-SANCHÍS, JESÚS. 1993. La 'sauna' de Ulaca: saunas y baños iniciáticos en el mundo céltico. Cuadernos de arqueología de la Universidad de Navarra. 1, PP. 177-254
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario